Suele ser común que si hablamos de reconocimiento por parte de la crítica de un restaurante, lo primero que se viene a la cabeza sean las famosas Estrellas Michelin. La Guia Michelin tene una larga trayectoria sobre sus espaldas. Esta guía lleva desde 1920 ofreciendo información sobre restaurantes para los viajeros, desde 1926 puntuando con una estrella aquellos restaurantes más destacados y desde 1930 ofrece una puntuación entre 1 y 3 estrellas. Las tres Estrellas Michelin se otorgan a los mejores restaurantes basados en tres principios básicos: Calidad, creatividad y esmero en sus platos. Ésto no incluye todo lo relativo al restaurante físico en sí, pues el confort, decoración y servicio se valora según un baremo distinto, los "cubiertos". Así, un restaurante de máximo lujo puede tener menos de tres estrellas, o no tener. En España, sólo hay siete restaurantes que consiguieron las tres estellas este año (puesto que es un galardón anual y esta sujeto a cambios) cuatro de ellos en Cataluña y tres en el País Vasco.
Empezamos la lista con los restaurantes catalanes:
1.- El Celler de Can Roca
El restaurante El Celler de Can Roca se ubica a las afueras de la ciudad de Girona, en la zona norte. Fue fundado en el año 1986 por los hermanos Joan y Josep Roca, justo al lado del restaurante familiar de cocina tradicional catalana que sus padres tenían abierto en Taialà, un barrio de Girona.
Con un planteamiento de cocina catalana creativa, aúna la cocina de autor y la investigación. Los hermanos Roca publican libros de cocina como "Los perfumes en los postres" (2002) o "La cocina del vino" (2006). Cuentan con una gran bodega con más de 1100 vinos distintos, siendo ésta uno de los grandes atractivos del restaurante.
Segun sus dueños, el concepto básico de su restaurante es aplicar la creatividad como una manera de transmitir sentimientos, percibidos en la experiencia sensitiva de los elementos que componen cada uno de sus platos.
Precio aproximado por persona: 150 €
2.- El Bulli
Este restaurante situado en Rosas (Gerona) fue creado en 1962 por un matrimonio alemán, como bar donde acudían los veraneantes. El negocio fue adoptando el nombre de "El Bulli" por los perros bulldog del matrimonio, conocidos popularmente como "bully" en francés. A finales de la década de los 60, a medida que la cocina iba cogiendo entidad, se convirtió en restaurante. A lo largo de los años pasaron diferentes cocineros. Con Jean-Louis Neichel, un famoso chef, el Bulli consiguió la primera estrella Michelin. En 1984 entró Ferran Adrià, siendo el chef al año siguiente y en 1997 consiguió por primera vez las tres estrellas Michelin. Actualmente, el restaurante es propiedad de Ferran Adrià.
Fue elegido durante cuatro años consecutivos el mejor restaurante del mundo por la revista gastronómica británica Restaurant, de 2005 a 2009.
Parte de su éxito ha sido introducir nuevas técnicas, como la deconstrucción que consiste en aislar los ingredientes de un plato típico para reconstruirlo de manera inusual, como su famosa tortilla de patatas.Su trabajo se interesa por la física y la química de los alimentos, lo que se llama "Cocina Molecular"
En 2012 Ferran Adría cerrará las puertas del Bulli hasta el 2014, cuando volverá a
abrir sus puertas como una fundación, sirviendo comidas ocasionalmente.
Precio aproximado por persona: 300 €
3.- Can Fabes
Can Fabes es un restaurante situado en San Celoni (Barcelona) cuyo chef es Santi Santamaría
y que desde
1994 tiene las tres estrellas
Michelin. Fundado en 1981 bajo el nombre de
El Racó de Can Fabes, está situado en una masía catalana secular y de familia convertida en un espacio de ocio gastronómico, según palabras de su dueño.
Este restaurante ofrece platos tradicionales catalanes unidos con modernidad ejemplo de esto son las gambas de Palamós, la papada de cerdo, las setas silvestres, la trufa o el foie-gras, donde no se olvida la tradición rural que el chef quiere impregnar todos los platos.
Precio aproximado por persona: 225 €
4.- Sant Pau
El restaurante Sant Pau es un restaurante ubicado en San Pol de Mar
, a medio camino entre Barcelona y
Gerona. La chef es
Carme Ruscalleda mientras que la sala está dirigida por su marido, Toni Balam. El edificio es una antigua torre construida en 1881 y que antes había funcionado como hostal. Su capacidad es de 35 personas y está abierto todo el año. Desde 2006 existe una réplica en Tokio con la misma filosofía en ambiente y cocina y que cuenta con dos estrellas Michelín.
El estilo de su cocina es creativo y moderno, aunque siempre basado en la tradición y los productos catalanes de temporada. Por ejemplo, aperitivos con
pepinos de mar, platos como las manitas de cerdo,
queso de Mahon y postres como madalenas hechas con vino de Banylus o la
coca de
cabello de ángel.
Los menús buscan ser equilibrados, saludables y formados por productos de temporada. Las cartas están escritas con lenguaje directo y sencillo, sin giros pomposos, con la prioridad de ser explicativos y, si se puede, con un toque poético o de humor. A veces se pueden encontrar referencias literarias dedicadas para aquellas personas a las que le guste entretenerse mientras espera la comida.
Precio aproximado por persona: 160 €